jueves, noviembre 13, 2003

Princesa...

Te quiero, Princesa; aunque me llame tu abogado, el abogado que has contratado, tratándome de usted, preguntándome si tengo abogados, como quien pregunta si tienes testigos para un duelo.

Te quiero, Princesa; aunque no haya sabido quererte, auque aun no sepa quererte.