viernes, enero 16, 2004

Fe de Vida vs. Fe de Errores


Reglamento del Registro Civil:

CAPÍTULO VI
De la fe de vida o estado


Artículo 363.

La vida, estado de soltero, viudo o divorciado se acreditan por la correspondiente fe del Encargado.

La vida se acredita también por comparecencia del sujeto o por acta notarial de presencia, y el estado de soltero, viudo o divorciado, por declaración jurada o afirmación solemne del propio sujeto o por acta de notoriedad.

Ningún órgano oficial, ante quien la vida se acredite por comparecencia del sujeto o el estado de soltero, viudo o divorciado por aquella manifestación podrá exigir otros medios de prueba, sin perjuicio de la investigación de oficio que proceda en caso de duda fundada. Por los órganos oficiales se advertirá previamente al declarante la responsabilidad penal en que pueda incurrir.


Artículo 364.

El expediente de fe de vida o estado se ajustará a las siguientes normas:

1.ª(...)
2.ª (...)
3.º Siempre que sea posible se pedirá declaración al propio sujeto sobre su identidad o estado.
4.ª Para la fe de vida, basta la identificación del sujeto.
6.ª Para el estado de soltero, viudo o divorciado se acreditará suficientemente su posesión, salvo que al Encargado le conste, y basta para acreditarlo la declaración jurada de una persona, preferentemente familiar.
7.ª Se tramitará con urgencia,y siempre dentro del plazo máximo de cinco días hábiles.


EL PAIS LIBRO DE ESTILO.
TÍTULO II. GÉNEROS PERIODÍSTICOS

SECCION 10: Fe de errores

2.94. El periódico ha de ser el primero en subsanar los errores cometidos en sus páginas, y hacerlo lo más rápidamente posible y sin tapujos. Esta tarea recae de manera muy especial en los responsables de cada área informativa. No obstante, todo redactor tiene obligación de corregir sus propios originales.
2.95. Los duendes de imprenta no existen. Tampoco los hay en la Redacción. Cuando se comete un error, se reconoce llanamente, sin recursos retóricos.



VARIACIONES BLOGGER

Dícese de la permante duda entre hacer de un blog una Fe de Vida o una Fe de Errores, debido a la falta de valentía para encarar cualquiera de ellas.